Vivo para recordarte.

Odio la soledad y aún así vivo en ella

Odio la guerra y aún así someto a mi corazón a una lucha constante

Odio el recierdo y aún así vivo para recordarte

Odios tus ojos y aún así espero que se crucen con los mios

Odio tu voz y aún así espero oirla cada mañana

Odio tu precencia y aún así espero que me salve de esta agonía

Pero lo que mas odio es sentirme así de frágil

Por un amor que no existe

Por un amor que no es real

Por un amor que es una mera ilución de una niña infeliz